Los Millennials, le otorgan casi un 10% más de importancia al tiempo de entrega que los Baby Boomers y un 5% más que la Generación “X”.
Además, según un estudio realizado por CollectPlus, el 79% de los encuestados habían esperado alguna vez entregas que no llegaron a tiempo y para el 61% en alguna ocasión el paquete no había llegado.
Mucho se ha hablado de la última milla, de cómo puede afectar a las empresas y a la satisfacción del cliente. Todo suma: desde los clasificadores, pasando por lectores de etiquetas hasta la empresa de reparto. ¡La logística es la clave!
Por ello es importante que, como empresa, sepas elegir un buen sistema de clasificación automática para cumplir con los plazos de entregas más exigentes.
Saber en qué punto estamos y a dónde queremos llegar se impone a la hora de mejorar nuestros procesos mediante su automatización. Un buen estudio de necesidades puede suponer una mejora de los costes operativos y la optimización de los procesos
Los sistemas de clasificación automática son la pieza de referencia del “puzle” logístico a la hora de decantar la balanza hacia un diseño u otro del centro de clasificación, según un informe publicado por Logística Profesional.
Los sistemas de clasificación tienen como objetivo convertir los complejos flujos de la intralogística en procesos eficientes.
Para enviar paquetes, sobres o cualquier tipo de producto de forma rápida y fiable, los centros de clasificación necesitan soluciones flexibles. Gracias a ellos, se optimizan y automatizan los procesos, acortando los plazos de entrega.
“Los sistemas totalmente automáticos y diseñados para ahorrar espacio son la mejor solución para diferentes tipos de soluciones.”
Esta variedad de funcionalidades convierte a los sistemas de clasificación en soluciones de intralogística eficientes en cualquier operación, “hub” o centro de distribución, garantizando un proceso rápido de pedidos y flujos operativos.
Las capacidades de las soluciones y el uso de diferentes tecnologías ofrecen gran cantidad de combinaciones, según el proceso de clasificado, adaptándose a una amplia gama de aplicaciones y volúmenes. Un punto importante, y por ello un gran reto, es la escabilidad de los clasificadores.
Encontramos en el mercado una gran variedad de clasificadores para todo tipo de productos, desde artículos (y paquetes) redondos, o con formas planas o inusuales hasta productos colgantes o a artícuenvueltos en polietilenolos colgantes y planos.
La gran versatilidad que ofrecen los clasificadores permiten que se pueden configurar de manera muy flexible para ofrecer la solución adecuada a cada requisito y restricción de ubicación. Ofrecen soluciones adhoc cuando un diseño estándar no funciona.
Los sistemas de clasificación deben de estar controlados por el software de clasificación, que deberá estar totalmente integrado y ser intuitivo. Los clasificadores, interconectados de forma inteligente con un sistema de gestión de almacenes (WMS) y un sistema de control de almacenes (WCS), y combinados con tecnologías de automatización y equipos de transporte líderes, abren nuevas posibilidades para la logística o centro de clasificación de paquetes.
Sabiendo que la tendencia del mercado va encaminada a implementar soluciones con mayor flexibilidad todo el stock y los pedidos ¡optimiza tus procesos con un sistema de clasificación adaptado a tus necesidades!